Aspectos que diferencian los CFDs de las acciones
Antes sería importante conocer; ¿qué es una acción?; la podemos resumir en pocas palabras, como un activo financiero. Al adquirir una acción, estamos adquiriendo la propiedad de una compañía; ya que las mismas integran mediante alícuotas el capital de la empresa.
La primera diferencia, es en cuanto a las operaciones cortas. Para las operaciones en corto lo ideal son los CFDs, pues, no tienen ningún tipo de limitación. Son utilizables para abrir posiciones de negociación larga y cortas y la ganancia puede provenir de los movimientos del mercado tanto con tendencia al alza como a la baja. En los casos de tendencia a la baja aprovecha más las operaciones en corto.
En las accione, las operaciones en corto, por lo general están restringidas o limitadas; son operaciones netamente especulativas; con la intención de que el precio tendrá una tendencia a la baja.
Por ejemplo en España, la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) prohibió las operaciones cortas en períodos determinados de tiempo.
Diferencia en cuanto al apalancamiento. Los CFDs básicamente se basan en operaciones apalancadas; que permiten operar con más dinero del que se posee en la cuenta. Como ya hemos mencionado, el apalancamiento en los CFDs puede dar beneficios o pérdidas.
En las acciones el apalancamiento no se permite y solamente podemos invertir o especular con el dinero disponible en la cuenta.
Diferencia en cuanto al mercado en los que operan. Los CDFs, en su contexto fundamental, son contratos en los que dos partes negocian directamente. Las acciones y su funcionamiento están respaldados por un mercado organizado, donde intervienen varios compradores y vendedores.
En las acciones, el mercado organizado tiene un intermediario que es la cámara de compensación que soporta el riesgo de las negociaciones y es transparente en cuanto a la información y cotización de los precios.
Los CFDs, funcionan en mercados no organizados; se les conoce con el nombre de “Over The Counter” (OTC). En esos mercados no interviene un mediador entre las partes.
Diferencia en los costos de financiamiento. En el caso de las acciones, como son operaciones a secas, sin margen de variaciones, no se producen costos de financiamiento.
En cambio los CFDs, cuando mantienen abierta una posición de un día para otro, hay que asumir unos costos de financiamiento; como ya vimos antes, sus posiciones abiertas generan intereses diarios hasta el momento del cierre.
Diferencia en la orden Stop. Stop o Stop loss, es una orden que se le da al bróker; detener una operación automáticamente, cuando el precio cae o baja a un nivel que te puede causar pérdidas.
El stop garantizado es el que aplica para los CFDs; normalmente utilizado para proteger tus operaciones. Es diferente a un convencional; en que el Stop garantizado, automáticamente cierra la operación. En el convencional, el precio puede tocar el Stop loss y se cierra la posición a un precio inferior o superior del que habíamos determinado para esta orden.
Diferencia en los costos de custodia. Son aquellos costos exigidos por las entidades bancarias o financieras; por resguardar los valores bajo su cuidado; solo aplica para el caso de las acciones y no para los CFDs.
Diferencia en el canon de bolsa. Es una renta o pago que establece la bolsa de valores por las negociaciones de compra y venta de acciones. Se aplica sobre las operaciones liquidas ya efectuadas y liquidadas; es decir cumpliendo las instrucciones sobre la liquidación, dictada por los mismos miembros del mercado.